Entorno Social TAILANDIA ÚLTIMAS NOTICIAS TAILANDIA - FEBRERO 2011: CARTA DE ÁNGEL BECERRIL A FUNDACIÓN PHI

Queridos amigos de la Fundación PHI,

A través de Fernando Arias he recibido la noticia de vuestro donativo en apoyo a los pequeños proyectos con las gentes que trabajo en el noreste de Tailandia. En mi nombre y en nombre de las muchas personas que se benefician de vuestra ayuda, os quiero agradecer vuestra generosidad y vuestro ser solidarios con otras personas más necesitadas. Vuestro donativo es más de agradecer en tiempos en que la sociedad española pasa por una crisis económica fuerte.

En 2010 yo fui trasladado dentro de la provincia de Nongkhai en el noreste de Tailandia a unos pueblos cercanos al río Mekong. Resido ahora en un pueblo que se llama PAKMU de unas ciento veinte familias (aproximadamente 600 personas). En las cercanías de este pueblo se encuentran otros muchos pueblos más grandes que Pakmu. La razón de residir en PAKMU es que este pueblo tiene unas doscientas cincuenta personas que son católicas con una iglesia y una pequeña casa de residencia. Es por tanto un lugar apropiado para relacionarse con las gentes de otros pueblos circundantes que en casi su totalidad son budistas.

He comenzado un servicio de ayuda a adolescentes de familias pobres y en no pocos casos desestructuradas para que reciban educación al menos hasta la edad de los diez y seis años. La única escuela de enseñanza media se encuentra en el pueblo central de la comarca, a 18 kms. La escuela que es estatal está bien equipada y reune a más de dos mil alumnos. Pero los alumnos tienen que costearse el viaje a la escuela y algunos otros costes adicionales. PAKMU es el pueblo más distante.

He comenzado a dar una prestación mensual para aliviar en cada adolescente las cargas económicas a estas familias pobres. Es una cantidad equivalente a unos siete euros mensuales. Al comienzo de curso, que es en mayo, he tenido 19 adolescentes en el proyecto. Se unirán algunos más. La razón de dar la ayuda por meses, es que si se da una sola vez al año, algunos se lo gastan en otras necesidades y luego dejan la escuela.

De otros pueblos vecinos ayudo también a algunos adolescentes así como a cuatro huérfanos de los pueblos donde trabajé anteriormente y cuya situación es de gran necesidad. A estos se lo doy una vez al semestre debido a las distancias. En total son ahora unos treinta adolescentes a quienes ayudo.

El abandono de la escuela a los catorce o quince es frecuente y produce una situación laboral de menores con grave riesgo de caer en la prostitución. Una escolaridad hasta los diez y ocho años garantiza una estabilidad y dignidad para quienes se incorporan en la sociedad.
Vuestra ayuda es un apoyo decisivo a la construcción de esa nueva sociedad de personas más formadas.

Algunas fotos de dichos adolescentes las llevaré a España este verano 2011 y las pasaré a Fernando.

Ángel Becerril

VER TESTIMONIO DE ÁNGEL BECERRIL: MI DIOCESANEIDAD

VER CARTA DE ÁNGEL BECERRIL "EL PEQUEÑO TRAVIESO ME EVANGELIZA"